domingo, 8 de julio de 2012

Sección de Profesores


PROFESORES QUE IMPULSARON EL DESARROLLO DE LA ESCUELA DE MUSICA
“SEBASTIAN ECHEVERRIA LOZANO”
                                                                                             
PETRICA SALDIVIA (1942- 1974)
Nacida en GUARICO en el Edo. Lara, de padres libaneses: Don ABRAHAM Saldivia y Doña Cristina S. de Saldivia. Residentes en la culta ciudad de El Tocuyo.
A la edad de los ocho años emprende sus estudios del Piano bajo la sabia orientación de Carlota FONTANA. Cinco años más tarde recomendada por el Profesor ANGEL RODRIGUEZ, acompaño al gran violinista FRANCO MEDINA, con resonante éxito. Termina sus estudios en Caracas, donde obtiene el titulo de profesional en la Academia “Niccoló Paganini” en el año 1937.
El año de 1940 se estabiliza en la ciudad Valencia y pasa a integrar el personal de la Escuela “Sebastián Echeverría Lozano” en el instrumento de su especialidad en un largo y sentido liderazgo que se extiende temporalmente a 30 años de ejercicio docente, pero que transcienden mas allá de las alturas, a través de la generación esplendida de los pianistas formados en su escuela.
Acompaño durante muchos años a los innumerables alumnos que se formaban en las Cátedras de Canto, Violín, Violonchelo y Flauta, logrando el aplauso y cariño del público valenciano.
PETRICA se convirtió en una fuerza arrolladora y plasmadora de excelentes muestras de su Magisterio como: ADOLFO GOMEZ, ANTONIO FEDON, RICARDO FUENTES Y CARLOS PINTO, para citar algunos de la pléyade infinita de alumnos que pasaron por sus manos.

ROGELIO PEREIRA (1961- 1984)
La docencia necesita de hombres dotados de una vocación vigorosa y un espíritu aquilatado; hombres en las pequeñas cosas y extraordinario en lo ordinario.
Así, andariego y nervioso, por las calles y avenidas se desplaza este hombre que moldea el mundo a su gusto. Su mundo, el de la sencillez, el de la honestidad, el mundo de ROGELIO, el mundo del “querer, querer siempre, querer con todas las fuerzas”, según Alfieri. El mundo que el mismo plasmo con tenacidad y sin jactancia.
Su preparación tuvo sus inicios en la Escuela de Música de Caracas, a la sombra de esa añosa encima, símbolo de autenticidad que se llamo: VICENTE EMILIO SOJO. Allí se laurea con todos los honores.
La docencia lo atrae por eso la ejerce con competencia y rigidez. Como la naranja cajera, PEREIRA aparece como un endocardio dulcísimo, aunque de cascara amarga.
Sus alumnos lo comprenden y se sientes felices con el galardón de su palabra animadora. El solfeo es una disciplina difícil, exige un gran temple de Maestro y alumno.
Armonista solicitado y Director por muchos años del Coro de la Escuela Peñalver, ejecutante de Violín y Viola en la Orquesta de Cámara de la UC, sus logros son patentes ante la comunidad venezolana de quien se ha convertido su estereotipo. Sus colegas lo admiran por su puntualidad, que no desiste ni ante la enfermedad, ni las dificultades. ROGELIO PEREIRA fue un verdadero Caballero Andante de la Música.

ANTONIA DE BOCKN (1961- 1969)
Mujer elegante, casi acicalada, en sencillez, expresividad y gentileza. Quienes la conocieron la recuerdan como una dama de mórbida piel casi transparente como la nieve de la cuna que la vio nacer en el puerto ruso de Kiev.
Desempeño el cargo en la Cátedra de Canto Profesional, desde su nombramiento, como titular de la misma, con la seriedad de un compromiso formal celebrado, en casto connubio, con sus alumnos y considero como un reto el desempeño de sus obligaciones que debía vencer con espíritu combativo y constancia y lo logro con su tenacidad.
Paso por la brisa valenciana, cuya presencia se hizo frecuente en los escenarios más cotizados de la ciudad.
Entre sus privilegiados alumnos, es justicia nombrar a: ENMA BELLO, HENRIQUETA HENRIQUEZ, FLOR GORNES Y GALLEGOS, HECTOR SANDOVAL, JOSE LUIS ZURITA, CARMENCITA, LUISA HERMINIA OJEDA, RAQUEL PINTO, IGINIO FRIDEGOTTO, YOLANDA CORREA, PATRICIA BOTTARELLI, HILDA de BASCARAN y MIRELLA CHIRINOS, tantos otros que centellan como estrellas alrededor de su figura inmortal.

GERTRUDIS DE PRUSZA (1953- 1960)
 Fue Trezebinia el lugar que vio nacer a este insigne músico. Los estudios musicales de la joven GEETRUDIS, se ven coronados en Praga, capital checa, adonde se había dirigido para realizarlos.
Su labor especial filigrana, la traslada a Venezuela, país donde se radicara definidamente, consagrándose con esmero a la enseñanza del Piano, el instrumento de su preferencia. Desde septiembre de 1948 hasta abril del 80, sus manos de habilidosa ejecutante rielaron sobre el mórbido teclado, para impulsar al balanceo rítmico de las balletistas en la Escuela “NINA NIKANOROVA”, donde desgrana su camándula de horas y sacrificios en la formación de esas libélulas humanas ya famosas, en escenarios patrios y extranjeros.
Desde agosto de 1953, como titular de una Cátedra de Piano en la Escuela de Música “Sebastián Echeverría Lozano”, desempeña con el temple y la delicadeza de un orfebre, su admirable actividad plástica en la formación de Pianistas talentosos, cuyos nombre interesa revelar. Preocupados alumnos se forjaron en el crisol de esta pedagoga insigne con letras de inmortalidad entre ellos se destacan: ANTONIO PECHINENDA, AURA MARINA RIOS, PIERTO PIOT.

FLOR GORNEZ Y GALLEGOS (1962-63) (1972- 1984)
En las postrimerías del año 1962 hace su entrada formal en la Escuela de Música la valencia FLOR GORNES Y GALLEGOS, una mujer con una casta preparación que la ha llevado al cultivo de de un arte refinado en la parcela cultual, donde, a su notoria propiedad de hilandera literaria, añade el hermoso paño de su poética, llena de finura y romanticismo, de lo cual es exquisito muestrario: “Saudade” uno de sus libros que constituido en puntal de su obra y de su fecunda producción, hacer de ella la Escrito insigne y de gentil estilo.
Un cumulo de Maestros llenaron el amplio currículo de este humilde y talentosa mujer, tales como TRINA FEO enseñándole el Piano, mientras RAFAEL ROMERO la entrenaba en el Bandolín y el Profesor JUAN VICENTE LECUNA  la iniciaba en elucubrativo de la Teoría.                                                                                                   De JULIO BRANDO recibe la enseñanza de las Artes Auditivas: Armonía y Contrapunto, de ANTONIO PINEDA aprende las secretas artimañas del Solfeo, de ANTONIA BOCKN a columpiar sobre tesitura de gamuzado timbre de Soprano que le califico con el mote de “La Soprano de voz tabú”, como implemento integrador de su formación, acudió a un seminario sobre Dirección Coral de Niños dictado por la cotizada arreglista MODESTA BOOR. Todo ello corroboro la carga positiva de sus conocimientos musicales que constituyeron el enérgico vivencial de la Profesora de Teoría y Solfeo de la Escuela de Música Oficial y la provisión y bastimento de los veintidós años masticados sobre el largo corredor vial de su carrera magistral donde sobresalió por su mansedumbre de índole y su preparación.                                                                                                     
FRANCISO SERRA (1951- 1974)
Notable chelista que se traslado desde la Madre España a las tierras venezolanas, de temperamento jacarandoso, muy alegre, pleno de dotes humanas muy importantes: su capacidad de relación, hacia que le dedicara largas horas a la conversación, lleno una década del ciclo evolutivo de la Escuela a la cual dedicaba una tarde entera a la semana por la circunstancia del frecuente compromiso con la Orquesta Sinfónica de Venezuela, de quien era integrante muy cotizado.
En Valencia, fuera de los límites de la Escuela Oficial integra la Orquesta de Cámara de la Universidad de Carabobo donde demuestra su talento y preparación.
Un ejemplar muy valioso que se vislumbra con caracteres muy definidos dentro de la música local, es DELFIN MARTELL, retoño genético de un contrabajista de grata recordación, pilar de la Orquesta de Conciertos dirigidas por el Maestro LUIS RAFAEL LOPEZ: RAFAEL MARTELL.
Destacan entre otros alumnos, competentes profesionales como lo son: ORLANDO PARRA, ALFREDO GUSTAVO GARCIA, AURA MARINA RIOS, NATHALIA ACOSTA.
La enfermedad y los achaques de la edad lo obligan a solicitar la jubilación, que puso término a su trabajo profesional muy alentador y fructífero.  
GRACIELA MENDEZ (1960- 1979)
Destacada alumna de la Escuela de Música, cuya solida formación estuvo a cargo de Petrica Saldivia y Estaban Nadas, entre otros su dotación, como pianista, puso las bases para escalar el profesorado, siendo una de las profesionales a duración plena en su actividad docente dentro de la Escuela Oficial, donde puso de manifiesto una gran paciencia y consideración con sus pupilos, actitud que conservo intacta durante sus años de servicio.
Fueron muchos alumnos que pasaron por su Cátedra, entre ellos: Dilcia Mendoza, Antonio Pechinenda y Beatriz Fedón.
La enfermedad y algunos problemas familiares la obligan a claudicar de una misión tan hermosa como lo es la enseñanza del piano, y recibe su jubilación.
VICTOR JULIO CASTILLO (1964- 1977)
Su experiencia en la Dirección de Bandas Marciales lo preconiza con la investidura de Conductor de la Banda Oficial 24 de junio, la cual, bajo su guiatura, se encamina por rutas de ascenso.
Sustituye en la Cátedra de instrumentos de Viento madera de la Escuela “Sebastián Echeverría Lozano” al ya nonagenario Profesor LUIS RAFAEL TELLEZ. Y cuando resucita la Orquesta Sinfónica de Valencia, se le nomina para Director.
Tuvo especial predilección por la formación de la Orchestrina conformada por sus alumnos destacados de la Academia, entre los cuales se consagraron entre otros, los Prazuela, meritoria familia integrada por el padre: Gabriel Prazuela y tres hijas, quienes formaban un conjunto denominado “Las Golondrinas”
Algunos factores de índole familiar la hicieron apresurar el procesamiento de su jubilación, cuando todavía la comunidad musical esperaba mucho de él.
MIGUEL CASAS AUGE (1964- 1975)
Este diminuto hombre, físicamente hablando, de estructura endeble, sin atractivo, notable en su fisionomía, merodeador, callado e incansable de algunos ambientes musicales que son como su lar, se identifica con el trabajo que “doma al acero, ablanda el bronce, labra la dureza del diamante”. Con su tesón expugna los reparos. Su obstinada porfía “derriba los muros mas doblados”.
La prudencia crece en su plantío cobijada por el vigor añoso de la experiencia, cumpliéndose en si la sentencia de Salmerón “El discreto se manifiesta cuando conviene y reserva para la ocasión forzosa la manifestación de lo que simulo”.


JUAN VIDAL PASTOR (1978- 1980)
De la hermosísima ciudad española de Valencia precede Juan Vidal. Hombre de contextura física solidad y de temperamento recio.
Director de de la Banda Oficial “24 de junio” luego de un arduo trabajo y espera.
Por una tradición, que data de años, el Director de la Banda ejerce una Cátedra dentro de la Escuela de Música por la cual, vacante la Cátedra de los instrumentos de Viento-madera, Juan Vidal la asume también, después del proceso jubilatorio de Víctor Julio Castillo.
2sus meritos preponderantes en el ejercicio docente fueron la puntualidad y la rigurosidad en la exigencia del estudio propuesto al alumno, factor de progreso notable en la Cátedra, a la cual integro a los Miembros de la Banda en su loable afán de mejoramiento profesional de los mismos.
Logro elevar la categoría de la Banda hasta obtener su jerarquización más alta: la de Sinfónica
ESTEBAN MARTINEZ ABARCA (1974)
Nacido en Lorca (Murcia) España. La vocación musical comienza desde los cuatro años, pero fue a los siete cuando comienza a hacerse popular cantando en reuniones familiares y participando en los coros de la escuela en distintos grados.
Después de haber cubierto sus años de estudios musicales, recorre diversas ciudades españolas integrando orquestas y compañías de variedades. En su ciudad natal de Lorca recibe un homenaje junto al prestigio concertista de guitarra Narciso Yepes y Pedro Campy, violinista integrante de la Orquesta Nacional de España.
Por los años 70 alterna dicha actividad musical con la enseñanza en clases particulares, en Colegios, Club del Acordeón, Hogar Hispano y en la Escuela de Música Sebastián Echeverría  Lozano.
Con el Maestro Abarca, se inicia la actividad instrumental en una sección de cuerdas tan importante y tan ambicionada por los candidatos al ejercicio, aficionado como profesional. 
Su temperamento de hombre amplio, sencillo y de trato exquisito se ha tornado de gota de miel que atrae al alumnado. Es ejemplar en la paciencia casi patriarcal con que maneja a modo de estrategia la parte metodológica de la enseñanza, asaz difícil para el aprendizaje de un instrumento completo como lo es la Guitarra. Por eso en su Cátedra han egresado valiosas cifras de la Música nacional y provinciana. Luis Delgado es uno, quien está dejando brillante huella en el panorama musical venezolano.
Humberto Delgado es otro puntero de la cosecha, estudioso de la Guitarra, del Piano y de otras disciplinas musicales, se desempeña como titular de una de las Cátedras de Solfeo, en la cual su eficiencia es la contrapartida de su responsabilidad con la Escuela.


PROFESORES DE ESTADIA LIMITADA

LUISA HERMINA OJEDA (1972- 1977)
Esta admirable mujer, dotada por la naturaleza de un regio temperamento y de una voluntad inconmovible, también rodeo su viña de una egregia corona de insertos al cepo familiar.
Su formación musical, donde había destacado como solista, vocalista y entrenadora de Coros infantiles, acrece a medida que maduran la edad y la experiencia, donde siempre se mueve como el pez en su elemento.
Su actuación dentro de la Escuela de Música no es solamente coadyuvante de la de Gustavo Celis, como esposo en función de Conductor, sino también personal: es hija de su formación integral y de su aspiración al tema: excelsior, que ha constituido el implemento de su trayectoria musical y humana.
A los que fueron sus alumnos, les llego el raudal de sus conocimientos con la difícil facilidad de su expresión, nunca defraudados en las dudas, siempre seguros el espaldar de su saber. A eso se le añade la orientación espiritual, el bálsamo sanador de mucha herida, su alentador llamado hacia la fe en el hombre y en el Supremo Hacedor.
 Impartió clases de Armonía.
RAMON ASCANIO (1964- 1980)
Humilde profesor, titular de la Cátedra de instrumentos de viento- metal y consocio de la Banda Oficial “24 de junio”, era un hombre de una integridad única. Impartía sus clases con amor y entusiasmo. Hombre cortés y responsable. Para quien no existía límite de tiempo.
RAMON ASCANIO, cae como los arboles gigantes, cargado de meritos y de virtudes ciudadanas y su labor de artesano del arte, deja la arquitectura monumental, perenne ejemplo de las juventudes venezolanas.


Juan Colmenarez